Gallagher Bassett cree que todas las personas tienen derecho a la igualdad de oportunidades de empleo y prohíbe cualquier forma de discriminación por parte de sus directivos, empleados, proveedores o clientes por motivos de raza, color, religión, credo, género (incluido el estado de embarazo), orientación sexual, identidad de género (que incluye a las personas transgénero y otras personas que no se ajustan al género), expresión de género, expresión del cabello, estado civil, situación parental, edad, origen nacional, ascendencia, discapacidad, afección médica, información genética, condición de veterano o militar, condición de ciudadanía o cualquier otra característica protegida (en lo sucesivo, "características protegidas") por la legislación federal, estatal o local aplicable. La igualdad de oportunidades de empleo se extenderá en todos los aspectos de la relación empleador-empleado, incluyendo, pero no limitado a, reclutamiento, contratación, formación, promoción, transferencia, descenso, compensación, beneficios, despido y terminación. Además, Gallagher Bassett realizará adaptaciones razonables a las limitaciones físicas o mentales conocidas de una persona discapacitada cualificada, a menos que la adaptación suponga una dificultad excesiva para el funcionamiento de nuestra empresa.